jueves, 25 de octubre de 2007

BLANCO, EN FONDO NEGRO


Cada vez que paso por aquí me da como un repente. Hay interiores lúgubres, casi abandonados. Me refiero a los interiores de personas. Normalmente los suelo ver en barrios ricos, en bares chachis, en la hípica de los hípicos y en los clubes de tenis de los/las que aspiran a que sus hijos sean nadales, o alonsos (brrrmmmm...) y, sobre todo, en los clubes de golf. Por Ofra distingo a gente con más o menos problemas, más o menos satisfecha, más o menos joven, más o menos viva, con más o menos cabeza... Pero no con un interior así. Tenemos otras preocupaciones.

No hay comentarios: