Salimos a dar una vuelta cámara en bolsillo. A mirar. Y vimos. Siempre vemos si miramos con atención. El equipo y tú que nos miras. Pero eso ya lo sabías. Luego nos sentamos a discutir cómo montábamos las entradas de hoy (no solemos hacerlas en grupo, ni salir en grupo, pero hoy era domingo y puente). Nos asombra el consenso, o lo fácil que llegamos a consensuarnos. Lo mismo ocurre con la gente del barrio, de éste y en general de todos. De lo contrario andaríamos como en el lejano oeste: a ver quién dispara primero.
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