Delante del ordenador sé que va a sonar el móvil antes de oír su señal. La pantalla empieza a emitir un sonido metálico, como si fuera a temblar. Luego escucho la llamada en mi móvil. Estas antenas son las responsables. Y mi ordenador, y yo mismo por tener móvil. Lo peor de todo es que me acostumbré a casi todo. Suerte del "casi".
lunes, 26 de noviembre de 2007
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1 comentario:
sigo sin entender la ausencia de comentarios. este sitio es un puente de diálogo. claro que yo veo poco, oigo poco, quizás se trate de conversar por dentro, con un@ mism@ ¿oiga?...
òscar.
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